
Documentos para Transporte Internacional (III)
Las cartas de porte en los transportes ferroviario y multimodal
CARTA DE PORTE FERROVIARIO
El transporte ferroviario supone unas ventajas respecto a otros medios en operaciones con gran volumen de carga o tonelaje, especialmente en trayectos largos. Su regularidad –y alta frecuencia–, el bajo índice de siniestralidad y el coste convierten esta opción en un medio idóneo para determinadas operaciones logísticas.
El documento que regula la contratación de un porte ferroviario ha sido creado por la Organización Intergubernamental de Transporte Ferroviario [OTIF], y se denomina Carta de Porte Ferroviario [CIM]. También existe una modalidad de contrato para transporte combinado, en el que el trayecto principal se realiza por ferrocarril.
Mediante la Carta de Porte CIM, el transportista se obliga a la realización del traslado de las mercancías en las condiciones acordadas a cambio de un importe determinado.
La Carta de Porte CIM es prueba del contrato de transporte y además informa sobre el título de propiedad de la mercancía, si bien no constituye en si mismo un título de propiedad, por lo que no es un documento negociable.
Mediante este contrato, emitido por el expedidor, la empresa porteadora se compromete a prestar el servicio que en éste se estipula y de acuerdo a las condiciones de transporte impresas en el reverso del original. El remitente tiene la obligación de enviar oportunamente el conocimiento original al consignatario, para que éste pueda retirar en el destino el embarque mediante la entrega del citado documento debidamente firmado, además de la liquidación correspondiente por el transporte efectuado.
Se extiende una sola Carta de Porte por expedición, que ampara las mercancías por igual durante todo el trayecto, aunque intervenga más de un ferrocarril.
CONOCIMIENTO DE EMBARQUE MULTIMODAL